Autopsia Psicológica
Es muy común preguntarse cuando alguien propicia su propia muerte, qué es lo que ha podido llevarle hasta ahí. En Psicología Forense, existe lo que llamamos autopsia psicológica y suele dar respuestas a esta y a muchas otras preguntas. Este proceso consiste en hacer una evaluación retrospectiva para recopilar toda la información de la persona que ha fallecido e intentar perfilar cómo fue en vida, es decir, características de personalidad, elementos psicológicos o psiquiátricos que hayan podido llevarle al deceso, historial familiar / pareja y laboral y económico, entre otros.
Muchas veces se suele pensar que lo que persigue la autopsia psicológica es un estudio psicológico post mortem de la persona pero no es así, lo que se intenta es explicar por qué recurrió a este tipo de desenlace.
Realizar este tipo de estudio no es nada fácil ya que, muchas veces, no hay información clara o los lugares donde debemos buscar han sido preparados para que no se encuentre la información pertinente. De hecho, puede ser incluso la propia víctima la que se encargue de que nadie pueda obtener información, -por ejemplo, un accidente de coche, se puede pensar que la víctima se salió de la calzada pero en realidad la imprudencia esconde una conducta parasuicida- y en otros casos, que sean otros lo que lo hagan porque de esa forma no se incrimina a nadie y parece una muerte autoprovocada. En este último caso, podemos creer que la víctima ha muerto de una forma determinada pero en realidad, está cubriendo al delito real y, por tanto, a sus autores.
Uno de los elemento determinantes que ayudan a entender un poco más qué es lo que ocurrió, es la presencia de un discurso suicida previo. Autores como Ceballos-Espinoza (2013,2014) nos hablan de las ya conocidas cartas suicidas o notas suicidas que suelen dejar en algún lugar fácilmente visible. Otra forma, más acorde a nuestra sociedad actual es dejarlo plasmado en las redes sociales.
El último fin que tiene aquí el psicólogo forense es exponer los hechos de la forma más objetiva posible y siguiendo siempre el razonamiento científico, ético y profesional.